En la calle de Dolores, entre Independencia y Artículos 123, dentro de lo que se considera el Barrio Chino más pequeño del mundo, podemos encontrar una puerta roja, algo que no tendría nada de extraordinario excepto porque esa puerta divide dos construcciones distintas, pues bien, detrás de ella se esconde el legendario Callejón de Salsipuedes, el mismo que sirvió de locación para aquella película de Pedro Infante en 1952, Un rincón cerca del cielo, tan dramática como la trilogía de Pepe el Toro.
Sin embargo su fama es mucho más antigua, ya en las crónicas del historiador Luis González Obregón nos hablaba en alguno de sus libros de aquel peculiar callejón de poco más de un metro de ancho, Juan de Dios Peza en Leyendas de las calles de la Ciudad de México, donde narra lejanos sucedidos de esta capital en verso, le dedica unas paginas al en nuestros días casi mítico Callejón de Salsipuedes.